Este es un pingüino papúa cuidando a sus pichones. Se llama así por el triangulo blanco que tiene sobre los ojos.
Mientras uno de los adultos va a pescar krill, el otro se queda a cuidar al polluelo, que, mientras tenga ese plumaje gris, no puede nadar. Recién con las plumas negras y blancas, segregan el aceite que las impermeabilizan y les permite resistir el frío del agua.
Los pingüinos regresan a la zona antártica al llegar la primavera y buscan a su pareja (tienen una sola pareja durante la vida). Arman el nido y tienen que cuidar a los pichones, enseñarles a nadar y a pescar antes de que termine el verano.
Hola Hernán y María Florencia, amo la naturaleza, me encanta la temática que plantean en su Blog y las hermosas imágenes que me transportan.
ResponderEliminarGracias
Cariños
Anahi :-)